El Coronavirus obligó al gobierno a cambiar las políticas de inmigración

Es bien sabido que desde la llegada del Coronavirus a los Estados Unidos y la alarmante cifra de personas contagiadas alrededor del país hizo que el gobierno actual cambiara las políticas de inmigración repentinamente.

Algunos de los cambios implementados hasta ahora son:

• Las fronteras permanecen cerradas a cualquier viaje no esencial (que no involucre intercambio comercial entre países).
• Los inmigrantes no pueden solicitar asilo o refugio temporalmente en los Estados Unidos.
• No se pueden solicitar Tarjetas Verdes (Green Cards).
• Las oficinas del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) están cerradas hasta junio, 2020.
• Las deportaciones son expedidas más rápido de lo normal para evitar el ingreso de inmigrantes a los centros de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).

Estos cambios han sido catalogados como estrictos por varios expertos, pero el gobierno asegura que estas medidas ayudan a proteger a la población local y al sistema de salud.

A pesar de las aparentes intenciones de la administración actual por proteger la ciudadanía y la economía, hay un tema de inmigración que ha sido muy controversial durante la crisis actual y es la deportación de menores de edad.

Las deportaciones a menores de edad continúan

Las entidades fronterizas no están permitiendo el ingreso de más inmigrantes al país por las fronteras terrestres.

Por ende, cuando los menores de edad llegan a las fronteras sin la compañía de un adulto responsable, está permitido deportarlos casi inmediatamente durante la pandemia.

Las cifras oficiales muestran que al menos 600 menores de edad fueron deportados durante abril del 2020.

La administración de Trump asegura que estas deportaciones ayudan a proteger y salvaguardar los recursos del país para la población local durante la crisis sanitaria provocada por el Coronavirus.

El riesgo de deportar menores de edad

Cuando los menores de edad llegan a las fronteras, normalmente son llevados a los Centros de Detención Juvenil alrededor del país.

Ellos tienen la oportunidad de presentar su petición de inmigración ante un juez. Si el juez local decide que el menor no cumple con los requisitos necesarios para residir en los Estados Unidos, la deportación debería realizarse solo después de que se haga la orden oficial.

Según las políticas de inmigración de Estados Unidos, un menor de edad puede ser deportado solo a Canadá o a México para evitar la trata de blancas u otros peligros inminentes.

Sin embargo, durante la crisis sanitaria provocada por el Coronavirus, todas las regulaciones para las deportaciones de menores de están no se están cumpliendo a cabalidad.

Los menores de edad enfrentan más peligro que los adultos por múltiples razones:

• Ellos son el objetivo de bandas criminales.
• Ellos son el objetivo de tratas de personas.

Además de eso, ellos enfrentan el riesgo de contagiarse de COVID-19 y no tienen a ningún familiar cerca para socorrer alguna emergencia de salud.

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La documentación perdida

Otra de las grandes críticas que ha recibido el gobierno de Trump durante los últimos años es la desorganización de los documentos de los menores de edad.

Hay decenas de casos confirmados en donde los menores de edad no pueden reunirse con sus familias porque no hay registro de sus familiares en la base de datos de las entidades fronterizas.

Varios testimonios alrededor del país declaran que los padres tuvieron que estar separados de sus hijos debido a que ICE no encontraba el historial de los menores de edad.

Esto ocurre debido a que los menores de edad que llegan a las fronteras son trasladados a cualquier centro de detención juvenil alrededor del país.

Estos centros están normalmente sobrepoblados y las entidades fronterizas deben revisar la disponibilidad de cada uno de los centros antes de poder enviar a los menores a las instalaciones de ICE.

¿Cómo evitar esta situación?

Es importante saber que hay una variedad amplia de opciones para solicitar entrada y residencia legal en los Estados Unidos.

Lo que hace falta para evitar este tipo de situaciones es buscar la ayuda de un experto y seguir los procesos de inmigración correctamente, evitando ir a las fronteras actualmente.

Evite el peligro para su familia y consiga la guía correcta para que su solicitud de inmigración sea aprobada por USCIS.

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